Con el propósito de compartir conocimientos y experiencias relacionados con la alimentación de aves de corral, la agencia de extensión del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA) en Chalatenango, desarrolló una capacitación para la elaboración de concentrado artesanal.
La actividad se realizó en el caserío La Coyotera, en el municipio El Paraíso, y asistieron técnicos de Catholic Relief Services (CRS) y de Cáritas, así como 12 promotores comunitarios que pertenecen a los municipios que conforman la Mancomunidad La Montañona (Chalatenango, El Carrizal, Comalapa, Concepción Quezaltepeque, Las Vueltas, La Laguna y Ojos de Agua) y otros como San Francisco Morazán y Dulce Nombre de María.
El extensionista Ohtmaro Alvarado, responsable de facilitar la capacitación, señaló que al compartir conocimientos para elaborar el concentrado, se pretende elaborar un producto más nutritivo para las aves a un costo menor que el del concentrado comercial, mejorar la dieta nutricional de las familias; además, que dicho conocimiento se irradie a más familias productoras.
Y es que según Alvarado, los materiales para elaborar el concentrado artesanal se encuentran fácilmente en las comunidades, pues algunos de los principales son: maíz (amarillo o blanco), maicillo, hojas de madrecacao, gandul o moringa (teberinto).
Les indicó que para elaborar 150 libras de concentrado artesanal deben contar con los siguientes ingredientes y en cantidades de:
Maíz molido (100 libras), maicillo molido (50 libras), ceniza de fogón (1 libra), harina de roca (1 libra), microorganismos de montaña, líquidos (1 litro), microorganismos de montaña, sólidos (1 libra), harina de hojas de madrecacao, gandul o moringa (5½ libras), harina de hojas de madrecacao, gandul o moringa (5½ libras), cascarón de huevo, molido (1 libra), melaza (1 galón), sal común (1 libra), agua y plástico (donde se mezclan todos los ingrediente).
Todos estos ingredientes son mezclados uniformemente. Estas 150 libras de concentrado son suficientes para alimentar 10 aves por un periodo de 6 semanas, considerando que esas 10 aves están consumiendo 25 libras por semana.
Esta capacitación fue coordinada con el CRS a través del proyecto Agricultura Restaurativa en Comunidades para la Sostenibilidad Económica (Raíces RRD), a quienes tambien se les brindó el taller para la construcción de incubadoras artesanales, con el propósito de fortalecerlos en todo lo relacionado con la crianza y alimentación de las aves.
El Paraíso, Chalatenango, 2 de abril de 2022
Comunicaciones – CENTA
