Después de dos años de no recibir visitas masivas de estudiantes u otros interesados en conocer las diferentes actividades que se realizan en el laboratorio de Parasitología Vegetal del Centro Nacional de Teacnología Agropecuaria y Forestal (CENTA), debido a las medidas sanitarias por el Covid-19, esta clínica especializada en el diagnóstico e identificación de plagas y enfermedades de las plantas recibió a un grupo de 70 estudiantes de sexto grado del Liceo Castilla.
Fueron los especialistas del laboratorio, quienes, a través de charlas acompañadas con presentaciones, muestras de plantas para análisis, microscopios o muestras de la colección entomológica, compartieron las diferentes actividades relacionadas con los insectos, bacterias, hongos, nematodos y enfermedades que atacan a las plantas.
En cada una de las áreas los niños y las niñas mostraron mucho interés; sin embargo fue en la colección entomológica donde la atención fue más intensa, al conocer los diferentes insectos que existen y que de alguna manera han tenido cierto contacto con él o han conocido alguna anécdota relacionada con los mismos.
Entre estos insectos conocieron los que causan daños en la agricultura, como las langostas voladoras o los zompopos; las que causan daño directo a las personas, entre las que se encuentran las avispas ahorcadoras, que según les explicó el experto, Mario Parada Jaco, esta avispa del subgénero Pepsis es una de las más grandes del mundo y que generalmente pica en el cuello de las personas. Otro insecto muy peligroso para la salud humana que conocieron son las chinches asesinas o besuconas que son las causantes del mal de Chagas.
La mayoría de los estudiantes anda por los 12 años como Jorge Enrique Cajal Silva, quien señala que le llamó la atención cómo afectan las bacterias a las frutas y a ciertos cultivos, y saber que cada insecto posee un nombre científico, el cual debo usar si estoy en otro país para saber que me estoy refiriendo al mismo insecto”.
Asimismo, para Andrea Sophia Villanueva fue una experiencia muy divertida que le permitió aprender más acerca de los insectos; “pude ver cosas que me impresionaron mucho, por ejemplo los beneficios y los daños en un ecosistema. Los insectos me gustaron porque son muy hermosos y tienen características muy interesantes. Estoy considerando pasar un hobby dentro de la entomología”.
Donovan Castillo, docente, considera que lograron el objetivo propuesto “que observen de primera mano algunos organismos vegetales y animales para que puedan reforzar el contenido aprendido en el aula”.
Esta clínica especializada en el diagnóstico e identificación plagas y enfermedades de las plantas, además de apoyar la generación y transferencia de tecnología agropecuaria y forestal, también es un espacio donde estudiantes de todos los niveles amplían sus conocimientos en lo relacionado con la fitopatología, entomología y nematología.
San Andrés, 27 de mayo de 2022
Comunicaciones CENTA
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