Un nuevo grupo de mujeres del sector rural del departamento de Sonsonate, se embarca en una iniciativa de transformación para fortalecer sus habilidades mediante capacitación en el procesamiento de alimentos. Ellas persiguen potenciar su economía y contribuir con el desarrollo sostenible de la familia y la comunidad.
Nohemí Santos, integrante de la Asociación Salvadoreña de Mujeres Emprendedoras “Isabel López” San Julián (ASMEILSAJ), quien tiene “cero conocimientos en el procesamiento de alimentos, pues me dedico a la crianza de pollos, y recibir la capacitación en CENTA ha sido una oportunidad que siempre he deseado para emprender un negocio y generar más ingresos”.
En total, fueron 10 mujeres procedentes de la Cooperativa Las Maravillas y de ASMEILSAJ, de la zona de San Julián, en Sonsonate, quienes recibieron indicaciones durante dos días sobre las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) y habilidades para la elaboración de deshidratado de frutas y hortalizas, láminas de frutas y confitado.
Nohemí forma parte de las 355 personas que este año han sido capacitadas por el Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA) a través del Laboratorio de Tecnología de Alimentos, en el procesamiento de hortalizas, frutas y granos básicos. Como cooperativa son asistidos técnicamente por la agencia de Armenia.
Blanca Miriam de Zepeda, productora de Las Maravillas, agradece por la capacitación brindada que le ha permitido adquirir nuevos conocimientos para el procesamiento de alimentos. “Somos una cooperativa de emprendedoras que estamos trabajando en hortalizas (rábano, pepino, tomate) y frutas. Nuestra idea es poner en práctica todo lo aprendido para salir adelante con nuestras familias y elaborar productos para comercializar localmente”, afirmó.
Jared López, técnico del Laboratorio de Alimentos, dijo que “hay grupos que inician desde cero, no tienen idea sobre el procesamiento de alimentos y se les enseñan las bases para que emprendan un negocio. Además, se les orienta en la forma adecuada para añadir un valor a su producto”.
Agregó que hay otro tipo de personas que se les apoya para la reformulación de su emprendimiento “con el fin de satisfacer la necesidad demandada se brindan técnicas avanzadas para mejorar la calidad de los productos”.
Los conocimientos prácticos facilitados por los profesionales del laboratorio del CENTA, les ha permitido a mujeres y hombres del sector rural, conocer sobre el procesamiento de alimentos, entre ellos: preparar encurtidos, escabeche, salsas, pastas, harinas, mermeladas, jaleas, frutas en almíbar, láminas de frutas, entre otros.
Por otra parte, para la encargada de Género de la Alcaldía de San Julian, Katherine Fuentes, la idea es que las mujeres pongan un emprendimiento, porque “una mujer empoderada contribuye a su crecimiento personal y económico”.
“Al adquirir estas capacitaciones se espera que puedan aprovechar los remanentes de sus cosechas y accedan a nuevos mercados y a su vez tengan más oportunidades”, dijo Fuentes.
Este tipo de capacitaciones fortalece las capacidades de las mujeres rurales y fomenta la innovación en la produccion agrícola.
San Andrés, 7 de diciembre de 2023
Comunicaciones – CENTA
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