Una gira de campo en el cultivo de frijol realizó el programa Granos Básicos del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA) en las instalaciones de la Estación Experimental de Izalco, con el objetivo de dar a conocer las características agronómicas de cuatro nuevas líneas promisorias de frijol común grano rojo que pasarán a la fase de validación a partir del mes de agosto de 2023.
A esta actividad asistieron coordinadores y técnicos de las agencias de extensión de Armenia, Sonsonate, San Juan Opico, Quezaltepeque y Zapotitán, quienes, junto con productores, tendrán una participación directa en el proceso de validación de las mismas.
Las líneas promisorias observadas fueron: SC 16021-27-3 y BRT 103-182 que han sido desarrolladas para enfrentar al cambio climático; y las líneas MCN 1327-52 y SMR – 72, para zonas tradicionales del cultivo. Esta última, con características de alto contenido nutricional (biofortificada).
Carlos Reyes, investigador del programa Granos Básicos, mencionó que este grupo de líneas provienen de ensayos preliminares de rendimiento y ensayos regionales realizados por el subprograma de frijol a partir del año 2018 en diferentes ambientes, con el objetivo de identificar y seleccionar nuevo germoplasma que presente resistencia a plagas y enfermedades, alto rendimiento y adaptación a diferentes ambientes.
Entre los materiales observados, a José Obdulio López, coordinador de la agencia en Armenia, le gustó la línea SC 16021-27-3 por su similitud al frijol de seda y puede ser una alternativa para las familias productoras, solo falta la validación que se hará a nivel de agencias de extensión. “Me parece bien que hayan otras variedades de frijol que puedan ser más resistentes al cambio climático y con un rendimiento alto”, dijo.
Para la coordinadora de la agencia en Zapotitán, Yasmín Arelí Pleites, esta gira fue muy positiva, porque permite observar el desarrollo de los materiales en el campo y conocer sus características, “por ejemplo la forma de la planta, el color del grano, forma de la vaina, su crecimiento; todo eso nos da una mayor idea para buscar las zonas y los colaboradores idóneos, teniendo en cuenta que son materiales que van enfocados al cambio climático”.
“También, conocimos el comportamiento del material biofortificado SMR-72 y la línea MCN 1327-52 que es como una mezcla de rojo de seda”, agregó la coordinadora de Zapotitán.
Lo valioso de esta gira con los técnicos extensionistas es que pudieron opinar, preguntar y valorar cada uno de los materiales, conocer sus bondades y sus desventajas y ver cómo pueden adaptarse en las zonas de influencia de las agencias de extensión a nivel nacional.
San Andrés, 8 de junio de 2023
Comunicaciones CENTA